Publicado por Hugo García en Juventud Rebelde
"Por tal motivo ha sido imprescindible declarar Patrimonio Cultural de la Nación Cubana la obra de numerosas personalidades de la Isla. Entre estas la colección de objetos y utensilios relacionados con las ceremonias religiosas de los cultos afrocubanos que utilizara hasta su muerte Arcadio Calvo Espinosa en las prácticas rituales en Guanabacoa, y que conforman un conjunto de altos valores etnográficos y folclóricos que debe conservarse en toda su integridad.
La obra y bienes de la poetisa Dulce María Loynaz, quien atesoraba con gran celo documentos históricos que tenían relación con su padre, general del Ejército Libertador Enrique Loynaz del Castillo, además de los manuscritos de sus obras y los de su hermano Enrique, destacado poeta".
¿Y las de Flor y Carlos Loynaz no?
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